La obesidad en perros es un problema cada vez más común, y el almidón en las dietas comerciales es uno de los principales culpables.
A pesar de la reducción en el consumo de grasas la obesidad sigue en aumento, indicando que el problema está en otra parte de la dieta.
La Evolucion y el Metabolismo Canino
Todos los mamíferos, incluyendo los perros, han evolucionado para sobrevivir en condiciones de escasez, desarrollando mecanismos eficientes para manejar la falta de alimentos. Sin embargo, no están equipados para manejar el exceso de almidón y azúcar que ahora prevalece en muchas dietas comerciales para mascotas. Este exceso puede alterar el equilibrio hormonal, provocando una sobreproducción de insulina y contribuyendo a la acumulación de grasa corporal.
Exceso de Almidón
Todos los mamíferos, incluyendo los perros, han evolucionado para sobrevivir en condiciones de escasez, desarrollando mecanismos eficientes para manejar la falta de alimentos. Sin embargo, no están equipados para manejar el exceso de almidón y azúcar que ahora prevalece en muchas dietas comerciales para mascotas. Este exceso puede alterar el equilibrio hormonal, provocando una sobreproducción de insulina y contribuyendo a la acumulación de grasa corporal.
Los mamíferos, incluidas las mascotas y las personas, no tienen la capacidad de manejar el exceso constante de almidón y azúcar. Hay una explicación lógica.
Durante cuatro mil millones de años de evolución, las criaturas se adaptaron a su entorno, y nunca se encontraron con niveles altos constantes de almidón y azúcar. Si analizas cualquier cosa que pueda constituir alimento o nutrición en cualquier parte del mundo, será baja en almidón y azúcar.
El contenido promedio de almidón y azúcar en la carne, pescado, huevos, insectos, plantas, frutas, bayas y verduras es aproximadamente del 4%. Por supuesto, la miel y algunas bayas son altas en azúcar, pero la miel era rara vez encontrada y las bayas son principalmente agua. Comer bayas hasta saciarse en realidad no sobrecarga el metabolismo, y aunque lo hiciera, las bayas no duraban más que unos pocos días en un entorno primitivo.
De 4% a 40%
Contrasta este contenido de almidón y azúcar del 4% del mundo primitivo con el contenido promedio de almidón y azúcar del 40% en los alimentos secos para mascotas.
Casi todos los alimentos secos para mascotas contienen un 40% de carbohidratos. Debería ser obvio hacia dónde va esta discusión; 4% frente a 40%.
Una sola gran alimentación diaria con una dieta que es 40% carbohidratos está en drástico conflicto con lo que hemos evolucionado para prosperar, y constituye un abuso literal de las hormonas.
Considera que hay 8 hormonas que elevan el azúcar en sangre, pero solo una que lo disminuye. De esto, podemos concluir que la naturaleza vio una gran importancia en mantener el azúcar en sangre a un nivel mínimo seguro, y relativamente poca necesidad de reducir el azúcar en sangre.
Esta única hormona reductora del azúcar, la insulina, fue inventada, por así decirlo, para capturar el raro o ocasional pico de azúcar en sangre y almacenarlo como grasa. En este sentido, la insulina desempeñó un papel crítico en nuestra evolución, y como sabemos, la insulina es muy eficiente en esta tarea. La hormona insulina es idéntica, hasta la última molécula, en todos los mamíferos, y hace exactamente lo mismo en todas las criaturas.
Riesgos de la Obesidad en Perros
La obesidad en perros puede llevar a numerosos problemas de salud, incluyendo:
- Diabetes: El exceso de peso puede afectar la producción y regulación de insulina.
- Problemas Cardiovasculares: El corazón tiene que trabajar más para bombear sangre a un cuerpo más grande.
- Artritis y Problemas Articulares: El exceso de peso pone una tensión adicional en las articulaciones y huesos.
- Reducción de la Esperanza de Vida: Los perros obesos tienden a tener una vida más corta debido a las complicaciones de salud.
Soluciones para la Obesidad en Mascotas
Para abordar la obesidad en mascotas, es crucial centrarse en tres aspectos: ejercicio, control de porciones y la calidad de la dieta.
Ejercicio Regular: Asegúrate de que tu perro haga ejercicio diariamente para quemar calorías y mantener un peso saludable. Paseos largos, juegos y actividades al aire libre son esenciales.
Control de Porciones: Alimenta a tu mascota con porciones controladas para evitar el sobreconsumo. Consulta a tu veterinario para determinar la cantidad adecuada de comida según la raza, tamaño y nivel de actividad de tu mascota.
Dieta de Calidad: Opta por alimentos crudos, congelados, liofilizados o enlatados que contengan ingredientes naturales y bajos en almidón. Aunque puede ser costoso alimentar a las mascotas con una dieta completamente fresca o cruda, reducir la cantidad de croquetas secas y aumentar la proporción de alimentos naturales mejorará significativamente la nutrición de tu mascota.