Cáncer, obesidad, diabetes: ¿Por qué los perros están sufriendo de las mismas enfermedades que los humanos?

En los últimos años, hemos visto un aumento alarmante en enfermedades crónicas como el cáncer, la obesidad y la diabetes en perros, que antes eran consideradas exclusivas de los humanos. Esto nos lleva a cuestionarnos ¿qué estamos haciendo mal?

Un análisis detallado muestra que la respuesta está estrechamente relacionada con su dieta, estilo de vida y exposición ambiental.

En este artículo exploraremos cómo la nutrición se ha convertido en un factor determinante en la salud de nuestras mascotas y cómo otros elementos contribuyen a este preocupante fenómeno.

Enfermedades humanas que ahora afectan a los perros

Los perros comparten cada vez más nuestras costumbres, entorno y, desafortunadamente, nuestras enfermedades. Estas enfermedades crónicas en perros no solo reducen su calidad de vida, sino que también aumentan los costos veterinarios y generan un impacto emocional significativo en sus dueños.

Un estudio publicado en el Journal of Veterinary Internal Medicine muestra que la obesidad afecta entre el 25 % y el 40 % de los perros en países desarrollados. Esta condición está vinculada no solo a malos hábitos alimenticios, sino también a patrones de sedentarismo y dietas inadecuadas. Además, estudios recientes han relacionado estas enfermedades con el consumo prolongado de alimentos procesados, similares a los que han causado problemas de salud en humanos.

La nutrición: un pilar fundamental en la salud de los perros

El problema de las dietas procesadas

La mayoría de los alimentos comerciales para perros, especialmente las croquetas y alimentos secos, contienen ingredientes que no cumplen con las necesidades biológicas de los perros. Estos alimentos suelen incluir:

  1. Carbohidratos refinados: Los perros necesitan cantidades mínimas de carbohidratos, pero los alimentos comerciales suelen tener altos niveles de granos, maíz y harinas procesadas, lo que genera picos de glucosa y aumenta el riesgo de diabetes.

  2. Subproductos animales: Aunque pueden parecer una fuente de proteínas, estos subproductos son de menor calidad y carecen de los nutrientes esenciales que los perros necesitan.

  3. Conservantes y aditivos químicos: Muchos alimentos procesados contienen antioxidantes sintéticos y colorantes artificiales que pueden ser perjudiciales a largo plazo.

Un estudio publicado en BMC Veterinary Research destaca que estas dietas ultraprocesadas están asociadas con el desarrollo de enfermedades inflamatorias crónicas, resistencia a la insulina y ciertos tipos de cáncer.

Necesidades biológicas de los perros

Como descendientes de los lobos, los perros están biológicamente diseñados para consumir dietas ricas en proteínas animales, con cantidades moderadas de grasas y muy bajos niveles de carbohidratos. Las dietas modernas han invertido estas proporciones, creando desequilibrios nutricionales que afectan su salud.

Un informe del European Journal of Companion Animal Practice enfatiza que los perros alimentados con dietas frescas, balanceadas y naturales muestran niveles más bajos de inflamación, mejor salud digestiva y mayor longevidad.

Factores adicionales que afectan la salud de los perros

Aunque la nutrición es un factor clave, otros elementos también juegan un papel importante:

  1. Sedentarismo: Muchos perros urbanos carecen de ejercicio adecuado. La falta de actividad no solo contribuye a la obesidad, sino que también afecta su salud cardiovascular.

  2. Exposición a toxinas: Los pesticidas, los productos de limpieza y ciertos medicamentos pueden ser desencadenantes de problemas de salud crónicos.

  3. Factores genéticos: Si bien la predisposición genética no puede cambiarse, una alimentación adecuada puede minimizar el impacto de estas condiciones.

  4. Estrés: El estrés crónico puede debilitar el sistema inmunológico de los perros, haciéndolos más susceptibles a enfermedades.

Beneficios de una dieta natural y equilibrada

Volver a una dieta natural puede ser transformador para la salud de tu perro. Las opciones más recomendadas incluyen:

  • Dietas crudas balanceadas (BARF): Diseñadas para imitar la dieta natural de los perros en la naturaleza, estas ofrecen altos niveles de proteínas de calidad y nutrientes esenciales.

  • Alimentos cocidos en casa: Preparados bajo la guía de un nutricionista canino, aseguran que tu perro reciba una dieta libre de conservantes y de alta calidad.

  • Dietas húmedas naturales: Estas suelen contener menos carbohidratos y más proteínas que las croquetas, lo que las hace más apropiadas biológicamente.

Estudios recientes han demostrado que los perros que consumen dietas frescas tienen una menor incidencia de enfermedades inflamatorias, mejor salud oral y un sistema inmunológico más fuerte.

Prevención a través de la educación y el cambio

Es fundamental que los dueños de mascotas comprendan que el bienestar de sus perros depende en gran medida de las decisiones diarias que toman. Educarse sobre los ingredientes en los alimentos comerciales, optar por dietas naturales y fomentar la actividad física son pasos esenciales para prevenir enfermedades crónicas en perros.

El aumento de enfermedades crónicas en perros es un reflejo directo de los cambios en su estilo de vida y alimentación. Adoptar una dieta más natural y prestar atención a factores como el ejercicio y la exposición a toxinas puede marcar una gran diferencia. Comprender y atender las necesidades biológicas de nuestras mascotas es el primer paso para garantizarles una vida larga y saludable.

Bibliografía

  1. Chandler, M., et al. (2017). Obesity and Associated Comorbidities in Companion Animals. Journal of Veterinary Internal Medicine, 31(5), 1231-1240. https://doi.org/10.1111/jvim.14708

  2. Knop, K., et al. (2020). The role of diet in the development of diabetes in dogs. BMC Veterinary Research, 16(1), 395. https://doi.org/10.1186/s12917-020-02626-w

  3. Freeman, L. M., et al. (2013). Current knowledge about the risks and benefits of raw meat-based diets for dogs and cats. Journal of the American Veterinary Medical Association, 243(11), 1549-1558. https://doi.org/10.2460/javma.243.11.1549

  4. Zaghini, A., & Biagi, G. (2005). Nutritional peculiarities and diet palatability in the dog and cat. The Veterinary Clinics of North America: Small Animal Practice, 35(5), 721-746. https://doi.org/10.1016/j.cvsm.2005.03.003

  5. Laflamme, D. P. (2012). Companion Animal Obesity: A Growing Epidemic. The Veterinary Clinics of North America: Small Animal Practice, 42(4), 669-680. https://doi.org/10.1016/j.cvsm.2012.04.004

 

cropped-cropped-favicon-wuf-1-1.png

Compártelo con tus amigos

Subscribete A Nuestro Newsletter

Recibe actualizaciones y noticias en nutrición canina y felina

MÁS A EXPLORAR...